miércoles, marzo 14, 2007

Previa al viaje

En días próximos me iré de viaje, aunque la fecha ya se ha corrido como tres veces. Inicialmente era 1 de Febrero, luego 1 de Marzo, luego 1 de Abril, ahora parece que otro inconveniente retrasará el viaje, espero que no sea un mes completo. En fin, el punto es que ando tal como dice la canción "estás que te vas y te vas, y te vas y te vas, y no te has ido". Pero tarde o temprano -y espero que sea más temprano que tarde- voy a largarme. Me la he pasado toda la vida dizque estudiando, y se me olvidó tomar un cursito de tramitología para enfrentar a la burocracia despiadada que circunda tanto la universidad como la gente que me financia el viaje.

Definitivamente esta previa está como las previas de Fox Sports a cualquier partido argentino: dura más la previa que el evento. Y espero que no sea así, aunque hay muchas probabilidades de que me demore más despidiéndome que estando en territorio paulista.


Igual, no me extrañen demasiado, y eso es una orden. Con mi mamá dejé un amigo que es como otro hijo de ella, entonces espero que no tenga porqué -aunque con lo nostálgica que es, va a ser muy difícil-. Al resto de la familia, he durado más tiempo desaparecido de lo que voy a durar en São Paulo, entonces no tienen porqué extrañarme mucho, quizás no estén acostumbrados a mis ausencias, pero sí a que esté ausente. A mis amigos -que, ahora que hago cuenta, son más bien bastanticos- no pierdan el nivel, que a la vuelta tendremos rasca con cachaça, o en su defecto con caipirinha (pero solo para empezar, pues por lo que sé la resaca de esa joda es como brava; después quizás de nuevo nos vendamos a la vieja aguilatorade, o al tradicional guaro paisa, o en el mejor de los casos, a nuestro nuevo amigo juanito el caminante).

Bueno, solo espero antes de irme dejar todo organizado. Lo único que realmente me preocupa en este momento es el dichoso proyecto doctoral. Ya voy por la cuarta redacción, y definitivamente aún me siento inconforme. Sí creo que ha madurado, pero no sé, no me puedo consolar con argumentos del tipo "X terminó su proyecto; X es menos competente que yo; Ergo yo debo terminar mi proyecto". Dejando de lado porqué el argumento me parece falaz, y la comparación hasta vulgar, creo que lo que sucede es que estoy acostumbrado (mal acostumbrado) a trabajar bajo presión, y aunque con esto la he tenido, la verdad es que no la he sentido. Bueno, en fin, espero terminar pronto esa joda, si tanto comentarista de Aristóteles lo permite.